viernes, 17 de agosto de 2018

Los 7 pasos del perdón

Daniel Lumera; Los 7 pasos del perdón.

Conexión entre perdón y felicidad


El perdón es una dieta alimentaria, dieta emocional, dieta mental, dieta espiritual y dieta física.

Los pensamientos son alimentos. En USA han medido los alimentos en megahercios en vez de calorías. Hay alimentos que contienen más luz que otros. Los alimentos nutrientes son luminosos. 


El perdón arregla los malos pensamientos y malas emociones. 

Eliges amar en vez de odiar. Y se libera una enorme potencia. 

Perdonar tiene un impacto enorme en los que me rodean y el mundo. 

La sanación es no seguir alimentando el juego de perpretador y víctima. 

Hay que tener mucho coraje para perdonar, no significa que no tengas miedo. Coraje significa tener corazón, es pensar, sentir y actuar a través del corazón. 

El amor es lo que hace cambiar y el perdón es puro amor. El dolor es amor retenido y el dolor lo libera. El perdón libera el pasado. 

El perdón educa.

Si te agarras sufres. 


Confiar en la vida. Agradecerle a la vida. 

Es difícil ver el fin qué hay en cada tragedia. 

Perdóname porque te he odiado, porque he querido que te mueras , perdóname porque no he podido amarte. Todas cosas con las que te has hecho daño a ti mismo.


Perdonar es una manera de ir. No un acto puntual. 

Perdonar no es olvidar, es vaciarse del odio.

Perdonar es no retener. Es saber dar. La culpa es una dependencia. Al liberar a los demás te liberas tu. 


El perdón como desbloqueo...


El perdón también depende de la energía que se tenga en ese momento presente. Hay rencores de 30 años que se perdonan en un minuto y algún hecho nimio que se vuelve imperdonable en ese momento. 

El perdón; camino de gratitud, amor y desapego. El perdón integra las emociones . Es una Sanación anímica.

Cuando lo pierdes todo allí sale la exigencia real de entender, entras en una dimensión auténtica de las cosas y allí el perdón encaja como herramienta espectacular . 


Perdonar no significa reaccionar. Si te perdono no te estoy justificando. Significa actuar libre del otro. Libre de la rabia, libre de la frustración . El perdón es actuar libre de odio. 

Cuando no puedes comprender es que no puedes perdonar. 

Si no te sientes amada es porque no estás amando. 


Qué regalo me trajo esa traición. 

Reescribir las propias ofensas o traumas afrontándolos utilizándolo como don para crecer. 

Escuchar el miedo, el dolor de lo que ha pasado. No seguir odiando lo que te ha pasado. 

Tienes miedo de justificar la acción de tu marido. Salir de la condición de victimas. 

Puedo dejar caer el dolor y el odio y seguir siendo yo misma. Pero ya en alerta que no lo voy a volver a permitir . 

Hay cosas que yo no he deseado en mi vida y me han servido tanto.

lunes, 13 de agosto de 2018

La muerte en Venecia


La muerte en Venecia
Thomas Mann

la grandeza de toda su obra estaba hecha de un minucioso trabajo cotidiano; era la resultante de cientos de inspiraciones breves, y debía la excelsa maestría de la concepción total y de cada uno de los detalles al hecho de que su creador, con tenacidad y energía semejantes a las del héroe que conquistara su provincia natal, supo perseverar años y años bajo la tensión de una misma obra, consagrando a la labor de ejecución, propiamente dicha, sus horas más preciosas e intensas. II

Casi todas las cosas grandes que existen son grandes porque se han creado contra algo, a pesar de algo: a pesar de dolores y tribulaciones, de pobreza y abandono; a pesar de la debilidad corporal, del vicio, de la pasión. II

Uno llega a dudar de que haya otro heroísmo que el heroísmo de la debilidad. II

Llegar por tierra a Venecia, bajando en la estación, era como entrar a un palacio por la escalera de servicio. Había que llegar, pues, en barco a la más inverosímil de las ciudades. III

Los sentimientos y observaciones del hombre solitario son al mismo tiempo más confusos y más intensos que los de las gentes sociables; sus pensamientos son más graves, más extraños y siempre tienen un matiz de tristeza. III

La soledad engendra lo original, lo atrevido, y lo extraordinariamente bello; la poesía. Pero engendra también lo desagradable, lo inoportuno, absurdo e inadecuado. III

Las profundidades del arrepentimiento. III

La dicha del escritor es su posibilidad de transformar la idea enteramente en sentimiento; el sentimiento, totalmente en idea. IV

El maravilloso acontecimiento de la aurora sumía en profunda adoración a su alma, consagrada por el sueño. Cielo, tierra y mar permanecían aún envueltos en la suave palidez fantástica del alba: una estrella lánguida flotaba aún en el infinito. Pero venía un suave soplo, como un dulce mensaje de inasequibles lugares con la nueva de que Eros se levantaba del lecho conyugal, y por ello acontecía aquel primer rubor dulcísimo de las lontananzas del cielo y del mar, por el cual se anuncia que la creación toma formas sensibles. IV

En el digno rostro del hombre maduro nada indicaba la conmoción interior; pero en los ojos de Tadzio brillaba una curiosidad, una interrogación pensativa; su paso vacilaba; bajaba la vista, volvía a alzarla graciosamente, y cuando ya estaba lejos, algo en su actitud indicaba que sólo la urbanidad le impedía volverse. IV

Aquella sonrisa fue recibida como un obsequio fatal. IV

La pasión, como el delito, no se encuentra a sus anchas en medio del orden y el bienestar cotidiano; todo aflojamiento de los resortes de la disciplina, toda confusión y trastorno le son propicios, porque le dan la esperanza de obtener ventajas de ellos. V

Así era Venecia, la bella insinuante y sospechosa; ciudad encantada de un lado, y trampa para los extranjeros de otro, en cuyo aire pestilente brilló un día, como pompa y molicie, el arte, y que a los músicos prestaba sones que adormecían y enervaban. El aventurero creía que sus ojos recogían todo aquel esplendor, que sus oídos estaban envueltos en aquellas melodías; recordaba también que la ciudad estaba enferma y que se trataba de ocultar tal circunstancia por codicia. Así avanzaba con ansia desenfrenada hacia la góndola que marchaba ante él. V

Sólo tenemos la edad que aparenta nuestro espíritu y nuestro corazón. V

Los poetas, no podemos andar el camino de la belleza sin que Eros nos acompañe y nos sirva de guía; y que si podemos ser héroes y disciplinados guerreros a nuestro modo, nos parecemos, sin embargo, a las mujeres, pues nuestro ensalzamiento es la pasión, y nuestras ansias han de ser de amor.V


Mercedes Salisachs; El secreto de las flores

1 Y lo que es peor, el desmoronamiento se produjo de repente, sin que hubiera intervenido antes un signo de alerta, ni los ecos de aquella n...