Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.166.
Nada puede llegar a ser correcto si no estamos en el recto orden con Dios.
Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.168.
Lo verdaderamente importante en la oración no es esto o aquello, sino que Dios se nos quiere dar….La oración es un camino para purificar poco a poco nuestros deseos, corregirlos e ir sabiendo lo que necesitamos de verdad: a Dios y a su espíritu.Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.171.
Damos siempre demasiado poco si sólo damos lo material.
Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.240.
Tenemos que aprender de nuevo, desde lo más íntimo, la valentía de la bondad; sólo lo conseguiremos si nosotros mismos nos hacemos “buenos” interiormente, si somos “prójimos” desde dentro y cada uno percibe qué tipo de servicios se necesita en mi entorno y en el radio más amplio de mi existencia, y como puedo prestarlo yo. Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.240.
Hay que recortar la autoexaltación del hombre y de las instituciones; todo lo que se ha vuelto demasiado grande debe volver de nuevo a la sencillez y a la pobreza del señor mismo. Joseph Ratzinger; Jesús de Nazaret, Planeta, tercera edición, Santiago, 2007, p.308.